CCOO de Industria | 23 abril 2024.

CCOO advierte de que sin una formación adecuada España difícilmente afrontará con éxito el reto de la digitalización

  • El país tiene cinco millones de desempleados y desempleadas, la mayoría de los cuales carece de la cualificación que buscan las empresas que intentan liderar la cuarta revolución industrial.

Como no podía ser de otra manera, la formación ocupará un lugar destacado en el debate que CCOO de Industria abrirá en septiembre sobre los desafíos y consecuencias de la digitalización. El sindicato es consciente de que España es uno de los países europeos donde se produce un mayor desajuste entre la formación de sus profesionales y las necesidades de las empresas. Por eso recuerda que, para evitar que se produzca una fractura social entre escolarizados y capacitados para participar en un mundo cambiante y global, se necesita tiempo e inversión.

23/08/2016. Madrid
Digitalización

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La educación y el empleo están en dos universos alternativos no conectados entre si. Las empresas requieren de profesionales que la formación reglada no ofrece, porque no evoluciona con tanta rapidez y facilidad como la revolución tecnológica, advierte CCOO de Industria. El sindicato también recuerda que la falta de apuesta por el desarrollo digital se manifiesta de forma acusada en las empresas, que no forman adecuadamente a sus empleados. El país padece un déficit de inversiones en educación, pero también de formación continua y de reciclaje de los trabajadores y trabajadoras en las empresas.

Lamentablemente, CCOO de Industria ha constatado que las empresas que intentan liderar la cuarta revolución industrial buscan talento que no existe en el mercado español. El problema reside en que la fuerza de trabajo no tiene las cualificaciones que se necesitan. La cuarta revolución industrial será para los altamente cualificados y con gran capacidad de adaptación, flexibilidad y aprendizaje continuo, con perfiles más multidisciplinares, con un currículo en competencias en ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas, ya sea de educación universitaria o un perfil más técnico procedente de la formación profesional superior.

Curiosamente, en España se produce la paradoja de que hay cinco millones de personas sin empleo (la segunda tasa más alta de Europa) y las empresas salen al exterior para buscar mano de obra española, ya que los más cualificados se fueron del país y los desempleados no tienen el perfil que el mercado demanda.

Según el sindicato, uno de los problemas es que el mercado adolece de vocaciones digitales, lo que se manifiesta en la escasez de ingenieros y empleados que se reciclan. Se requieren talentos digitales, formados en matemáticas y estadísticas y que, además, entiendan del negocio y de la gestión del mismo. En cambio, la política de ajustes, de recorte de salarios y de protección ante el desempleo, aplicadas durante los últimos años, ha creado puestos de baja cualificación y mal pagados.

Para CCOO, los cambios no deben venir sólo de la educación universitaria o especializada, sino que deben afectar al origen del problema: el sistema educativo. Conviene trabajar desde la escuela y poner en marcha medidas que reduzcan el elevado fracaso escolar que existe en el país, que duplica la media europea.

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