CCOO de Industria | 29 marzo 2024.

La digitalización en los sectores productivos, a examen

    Enmarcado en el convenio de colaboración que suscribieron hace cuatro años la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) y CCOO Industria para el cambio de modelo productivo, en el Paraninfo del Rectorado se celebró el 29 de mayo una jornada de debate sobre tres sectores productivos con importante influencia económica, social y tecnológica: agroforestal, aeroespacial y automóvil.

    04/06/2018. CCOO de Industra
    Guillermo Cisneros, rector de la UPM, y Agustín Martín, secretario general de CCOO de Industria, durante la apertura de la jornada

    Guillermo Cisneros, rector de la UPM, y Agustín Martín, secretario general de CCOO de Industria, durante la apertura de la jornada

    Personas expertas en las diferentes disciplinas explicaron, en las jornadas que organizaron CCOO de Industria y la UPM, cómo las nuevas tecnologías están cambiando la forma de actuar en la industria.

    Agustín Martín, secretario general de CCOO de Industria, destacó la importancia de situar en las universidades el debate sobre la digitalización ya que “son las que más soluciones y ayudas pueden aportar a la hora de generar valor en el sector”. Por su parte, Guillermo Cisneros, rector de la Universidad Politécnica de Madrid, destacó que “la universidad es debate y la UPM, por su carácter transversal y por tener el foco puesto en la ingeniería, puede aportar mucho a la discusión sobre cómo la tecnología está cambiando la industria”.

    Isabel Bombal, desde el Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, recordó que “el 84% del territorio español es territorio rural, aunque solo el 17% de la población está concentrado en él”. Incidió en la importancia de adaptar el sector a los cambios para hacer frente a los retos que conllevan las nuevas tecnologías. En España hay 900.000 explotaciones agrarias y más de 28.000 empresas, de las que el 95% son pymes. Cifras que hacen que haya “dos millones de puestos de trabajo que dependen directamente del sector agroforestal, que aporta el 10% del valor añadido al PIB y 125 mil empleos potenciales”.

    Andrés Montero Aparicio, Coordinador Técnico Grupo Focal digitalización y Big data en sectores agroalimentario, forestal y medio rural del Ministerio de Agricultura, abordó el reto de la digitalización en el sector agroforestal. Señaló la evolución de la sensorización en el ámbito agrario (de cero sensores en el año 2000 a los 600 millones previstos para 2020 y los dos billones para 2035), así como el proceso de conectividad digital y nuevas tecnologías que se viene implementando (robots, drones, Iot, etc.).

    Resaltó también la importancia del nivel formativo de las personas que son responsables de las explotaciones agrarias y la necesidad de atraer a las más jóvenes hacia la analítica de datos mediante el desarrollo de procesos participativos y colaborativos. Terminó asegurando que el sector tiene un 57% de automatización.

    Alicia Palacios Orueta, profesora del Departamento de Ingeniería y Gestión Forestal y Ambiental e investigadora del CEIGRAM; Luis Ricote, director de la ETSIAAB de la UPM y Pilar Pita, subdirectora de investigación, innovación y planes de estudio de la ETSI Montes, Forestal y del Medio Natural de la UPM, participaron en la mesa redonda sobre smartagro, moderada por Gabriel Dorado, profesor del Departamento de Ingeniería y Gestión Forestal y Ambiental de la Universidad Politécnica de Madrid. Debatieron sobre el sector agroforestal en España.

    Destacaron la importancia de las comarcas y el trato de las administraciones locales como fuentes de valor para el desarrollo de la formación directa agrícola. El sector forestal en España genera 125.000 empleos y supone el 1% del PIB, la media del resto de los países de la UE. Es el segundo país en superficie forestal, tercero en arboleda y cuarto en superficie ocupada por terreno forestal (Suecia, Finlandia y Eslovenia).

    El problema de la digitalización en este sector es que “es más fácil implantar sensores, satélites e instrumentos de información que explotarla y generar datos”. Es lo que está ocurriendo en la UE, donde existen medios que no se explotan por falta de tiempo o presupuesto. Al mismo tiempo, el mercado laboral necesita un “sistema de respuesta rápida”, ya que los alumnos van a las empresas para cubrir campos de los que no se ocupa la Universidad, por lo que ejerce de mayor valor la necesidad del vínculo estrecho de ésta con las empresas para generar nuevas capacidades formativas.

    Por su parte, Juan Mora Vega, director de Industria 4.0, Talento digital y eventos de AMETIC, incidió sobre la industria 4.0 en España y en el sector digital. Le siguió una mesa redonda sobre la industria 4.0 en el sector aeroespacial, en la que participaron Miguel Ángel Barcala Montejano, director del Departamento de Aeronaves y Vehículos Espaciales de la UPM; Jaime Fernández Castañeda, Head of simulation technology de la Dirección de Ingeniería Avanzada de ITP; Pedro José Alfaro, responsable de Lean Manufacturing y mejoras áreas de producción de CESA y Pedro López Alcocen, Social Policies and Industrial Relations de Airbus. La mesa estuvo moderada por Máximo Blanco, del Área de Estrategias Sectoriales de CCOO de Industria.

    Mesa sobre digitalización del sector aeroespacial

    Esta segunda mesa dedicó el debate a la situación de la digitalización en el sector aeroespacial, desde donde se señaló el retraso español esta materia. Se apuesta por la Universidad 4.0, con la creación de plataformas de enseñanza aeronáutica. Desde el sistema educativo se resaltó que existen muchas escuelas de ingeniería aeroespacial y pocas universidades que actúen en este campo. Apuntaron que es preciso adecuar los perfiles a la demanda empresa-alumno/a. El necesario vínculo con la Universidad no servirá, señalaron, sin una formación continua y permanente en las empresas.

    El futuro escenario industrial tiene como referencia principal la conectividad, la seguridad, la calidad, el mantenimiento y los menores costes. Dos mil proveedores cubren las necesidades del sector, lo que requiere la conectividad en materia de infraestructuras físicas y tecnológicas. Para ello, es preciso sacar partido a lo que ya tenemos: big data, fabricación aditiva, nuevos materiales…

    El diseño, el montaje y la fabricación están afectados por el desarrollo de la industria 4.0 en este sector, con efectos directos de las nuevas tecnologías en los procesos manuales (la robótica colaborativa -cobótica- es el futuro), así como un futuro en el que las lanzaderas para satélites se montarán en serie, mediante cadenas de lanzamiento. Todo este proceso debe estar apoyado por planes industriales y sociales desde el ámbito administrativo para que sea efectivo.

    Finalmente, en una mesa redonda moderada por Estella Acosta Pérez, del Área de Estrategias Sectoriales de CCOO de Industria, se abordaron los retos de la industria 4.0 en el sector del automóvil con Antonio Vizán Idoipe, director del Departamento de Ingeniería Mecánica de la UPM; Arantcha Mur, directora del Área Económica y Logística de ANFAC y Cecilia Medina, responsable de I+D+i y Formación de SERNAUTO.

    Mesa sobre digitalización del sector de automoción

    La tercera mesa resaltó que las habilidades digitales, la formación, el contenido cognitivo y no repetitivo serán los factores fundamentales de desarrollo de las personas y de la industria. El principal problema radica en la desconexión de la PYME de este proceso, “inquietos y desconcertados”. Al mismo tiempo, en este marco la potenciación de la formación profesional es determinante para la industria, donde las personas multidisciplinares tendrán una mayor cabida, es decir, las capaces de adaptarse a cualquier evolución tecnológica de futuro.

    En España existe una cuota muy baja de vehículos alternativos. Se requiere de un marco regulatorio apropiado para el coche conectado y autónomo. La entrega de un vehículo ha pasado de tardar 30 meses a 18, gracias a la industria conectada. El futuro es de los vehículos compartidos y autónomos, a los que acompaña una rentabilidad medioambiental. En este desarrollo, se viene produciendo la “trazabilidad unitaria”, mediante la información única de cada pieza de un vehículo para seguir su desarrollo y la vigilancia de la calidad de la misma, lo que ha requerido una fuerte inversión del sector.